Porque decís NO QUIERO.


Y ahí volvés. Volvés aguerrido. Volvés entero. Volvés con ejércitos de decisión y con estrategias de juego. Volvés mirando más allá. Mucho más allá del miedo. Y te quedás. Pero tampoco estás. Porque te vas de nuevo. Porque apretás Eject. Porque decís NO QUIERO.

Comentarios

Entradas populares de este blog

NADA MÁS VIOLENTO QUE LO ASFIXIANTE DE LOS VíNCULOS FORZADOS.

Todos somos mortales hasta el primer beso y la segunda copa de vino.

Ser o no ser >